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Din A4 normal
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Din A4 láser
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Din A4 fotográfico
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Papel adhesivo
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Para que un equipo de impresión ofrezca su resultado más óptimo debe contar con un elemento imprescindible: el papel. Dependiendo del tipo de impresora y del resultado que queramos obtener, así debe ser el tipo de hoja utilizada. A continuación daremos una serie de consejos básicos para escoger el papel impresora ideal.
¿Cómo elegir el papel fotocopiadora adecuado?
En el mercado hay una amplia variedad de papeles. ¿Cómo escoger el correcto para nuestra fotocopiadora? A continuación vamos a resaltar aquellos aspectos que hay que tener en cuenta para elegir un tipo u otro. Valorar estos factores nos ayudará a simplificar el proceso de elección y nos permitirá escoger el tipo de soporte adecuado para cada aplicación digital.
Lo primero a tener en cuenta es el tipo de documento que se va a crear y su finalidad. Por ejemplo, si el documento es para una presentación o una comunicación interna no es necesario que sea un papel satinado. Sí debería serlo, por el contrario, en aquellos casos en los que la comunicación pretende serlo con el exterior. Un encarte publicitario, por ejemplo, quedaría mejor en ese tipo de soporte.
Si vamos a realizar impresión digital debemos escoger un gramaje de entre 75 y 80 gramos. Con menor gramaje, la hoja tiende a arrugarse debido a la alimentación y al proceso de fusión. Si la impresión digital es, además, a color, el gramaje deberá ser mayor para que así se soporten correctamente las cuatro capas de toner. Si el tipo de hoja utilizada tuviera poco gramaje, podría ondularse y, además, podría degradar el registro de colores, con lo que la calidad de la imagen se vería afectada. Para obtener gráficos con una buena resolución y un buen contraste se recomienda elegir papeles suaves y brillantes.
Respecto al tamaño, escoger formatos estándar es siempre lo mejor. DIN A-3 y DIN A-4 permiten imprimir con el menor tiempo de espera y, además, garantizan un buen guillotinado. Esto es importante para que los bordes de la hoja no creen polvo de celulosa en la copiadora o equipo de impresión, cosa que sucede cuando el soporte no ha sido guillotinado o cortado con precisión. Ese polvillo se puede depositar en los rodillos del fusor del equipo o puede impedir una transferencia correcta del tóner. Los folios A4 que comercializan las diferentes marcas se convierten así en garantía de que eso no sucede tanto si se compra el folio DIN A4 normal como si se compra el papel para impresora láser.
Conocer nuestro equipo de impresión, los rangos de tamaño y gramaje que acepta y su mecanismo de alimentación debe servirnos, también, para escoger el soporte adecuado. Un proveedor con experiencia en impresión digital es la mejor garantía. Sus productos estarán específicamente diseñados para optimizar el funcionamiento de impresoras y copiadoras.
A la hora de realizar impresión digital hay que evitar el uso de papeles con recubrimiento para impresión en offset y asegurarnos de que utilizamos un soporte con recubrimiento diseñado específicamente para impresiones digitales.
En resumen, los conceptos a tener en cuenta a la hora de escoger un soporte de impresión para nuestra copiadora/impresora son los siguientes:
- Brillo. Al hablar de brillo hablamos del contraste, de la capacidad de reflexión del folio u hoja y de cómo contiene ésta la tinta o el tóner cuando está impresa. El nivel del brillo se califica de 1 a 100. Cuanto más alto sea el índice, más brillante será el soporte. Lo habitual es que el índice oscile entre 80 y 100. La hoja premium de fotocopia tiene un brillo de 96-97.
- Acabado. Dependiendo de éste, así absorberá la tinta y el tóner la hoja y así será su resistencia al desgarro. La clasificación, en este caso, oscila entre el 1 y el 5. A menor número, mayor calidad. Los acabados que podemos encontrar son: brillo, recubierto o couché, satinado, seda, mate.
- Peso. Peso y grosor son dos conceptos que van de la mano. Se clasifica en GSM (gramos por metro cuadrado).
- Opacidad. Esta cualidad se refiere a la transparencia de la hoja, a cuánto puede bloquear ésta el paso de la luz. Dependiendo de su nivel de opacidad, así podrá o no pasar la tinta o el tóner a la otra cara de la hoja cuando se imprime. Lógicamente, la opacidad y el grosor son dos conceptos que guardan íntima relación.
- Textura o suavidad. ¿Qué sensación causa el folio cuando lo tocamos? Éste puede ir recubierto o no. Los llamados papeles Bond tienen superficies sin textura. Son papeles especialmente indicados para escribir a mano y para la impresión tanto en casa como en la oficina.
- Tamaño. Existen diversos tamaños y dimensiones. El tamaño habitualmente utilizado en oficinas europeas como papel para impresora es el DIN A4 o folio (21 cm x 29,7 cm).
Tipos de papel para impresora
A la hora de comprar papel de impresora debemos tener presente si la nuestra es láser o de inyección de tinta. Para cada una de ellas podemos escoger entre diversos tipos de papeles.
Para obtener el máximo rendimiento de un equipo de impresión láser deberemos optar por el papel para impresora láser. Este tipo de soporte ayuda a mantener el polvo de tóner. El blanco brillante, por su parte, es un tipo de folio u hoja ideal también para este tipo de máquinas y permite obtener muy buenos resultados a la hora de imprimir a doble cara.
Para imprimir con una impresora de inyección de tinta, por su parte, podemos escoger entre los siguientes tipos de papel:
- Mate. Con una superficie absorbente y un rápido secado de las tintas, este soporte funciona muy bien con este tipo de dispositivos de impresión.
- Satinado. Al tener una superficie ligeramente brillante, se confunde a veces con el fotográfico. Aunque tarda un tiempo en secarse y es propenso a mancharse, es bueno para imprimir documentos en los que aparezcan imágenes y fotografías.
- Cartulina. Éste es el tipo de soporte que se utiliza para imprimir invitaciones, tarjetas de felicitación, tarjetones, etc.
- Papel fotográfico. Este tipo de soporte, como su propio nombre indica, se utiliza para imprimir fotografías. Su superficie brillante permite imprimir imágenes con colores vibrantes. Se puede encontrar en el mercado con diferentes revestimientos, pesos y medidas. Hay muchas marcas de impresoras que comercializan su propio soporte para imprimir fotografías. Así, por ejemplo, si la nuestra es HP, comprar un papel fotográfico HP nos permitirá obtener los mejores resultados.
Finalmente, podemos encontrar dos tipos de soporte por los que pueden optar las personas que compran papel para impresora. Una de ellos es el autoadhesivo y el otro es el reciclado.
El papel adhesivo para impresora lleva en una de sus caras una cinta de pegamento compuesta por resina o caucho sintético. Esta cinta permite enganchar y desenganchar en diferentes superficies. Elástico, este tipo de soporte puede ser brillante o mate. Esta modalidad no puede ponerse en un equipo de impresión láser pues el calor generado por el mismo deshace el pegamento, cosa que podría dañar la máquina.
El papel reciclado, por su parte, está elaborado con fibras recicladas. Este soporte está especialmente indicado para aquellos trabajos de impresión en los que no se necesita excesiva calidad tanto de texto como de imagen. ¿Su gran ventaja? Que permite cuidar del medio ambiente, aunque muchas personas no son partidarias de utilizarlo porque sostienen que deja en el equipo un polvillo que, de no ser limpiado, puede acabar dañando a la misma. Con un tacto parecido al del offset, su blanco no llega a ser puro.
